Muere el menor de 12 años que cayó ayer por un acantilado en Castro Urdiales
El niño, del País Vasco, se precipitó por una zona rocosa de Cotolino de unos 15 metros de altura | Un fuerte golpe en el pecho le provocó una parada cardiorrespiratoria
El menor de 12 años y vecino del País Vasco que cayó ayer por un acantilado de Cotolino, en Castro Urdiales, ha fallecido en Valdecilla como consecuencia de una parada cardiorrespiratoria provocada por el fuerte golpe que sufrió en el pecho.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 21.30 horas. La noche estaba desapacible por la lluvia que estaba cayendo en ese momento. Según señalan testigos, el menor se encontraba jugando con otro amigo al escondite por una especie de sendero -utilizado habitualmente por los pescadores- y donde se encuentra un bunker, cuando se precipitó por la pared rocosa a unos 15 metros de altura y cayó al agua. El otro chico le sacó hasta la orilla y fue a pedir ayuda a unos jóvenes que bajaron -con mucha dificultad- hacia donde estaba el pequeño accidentado, quedándose con él hasta la llegada de los primeros efectivos del parque de bomberos de Castro.
El Centro de Emergencias 112 de Cantabria también movilizó hasta el lugar del suceso a Policía Local, bomberos de los parques de Laredo, Guardia Civil, así como personal de Cruz Roja. También estuvieron presentes efectivos de DYA Cantabria.
Ante la orografía de la zona, inicialmente se avisó helicóptero de Protección Civil del Gobierno de Cantabria, pero ante la situación del tiempo y por «cuestiones técnicas» decidieron darse la vuelta y tanto el médico como los rescatadores se trasladaron por tierra desde Santander hasta Cotolino. Ante esta circunstancia se movilizó el helicóptero de Salvamento Marítimo (Helimer), también con base en Santander y que no está medicalizado, que fue quien finalmente realizó el rescate «porque era inviable hacerlo por mar o por tierra, era una zona de difícil acceso y había mucho oleaje», señala a este periódico Gorka Núñez, coordinador de la DYA.
No es la primera vez que se producen accidentes en la zona, el año pasado los servicios de emergencias también tuvieron que actuar allí por la desaparición de un pescador, pero «no suele ser habitual, no tenemos muchos avisos».
Herido rescatado y evacuado en helicóptero de @salvamentogob para atención en centro hospitalario. pic.twitter.com/dhqAStTSbW
— DYA Cantabria (@DYACantabria) August 5, 2025
El trabajo conjunto de todos los efectivos de emergencia logró acceder hasta el menor, que sufría un fuerte traumatismo en el pecho. Una vez con él, un médico logró estabilizarlo. Posteriormente fue izado en camilla con un cable hasta el 'Helimer'. Una vez en el aeropuerto Seve Ballesteros, una ambulancia de Soporte Vital Avanzado trasladó al menor hasta el Hospital Marqués de Valdecilla, donde falleció horas después por una parada cardiaca.
Movilizamos a @policialocaldecastro; @BomberosCastro; Bomberos del @112Cantabria;@guardiacivil y el #Helimer de @salvamentogob, así como el equipo de intervención de Protección Civil del @cantabriaes con un médico, dos rescatadores y el técnico de guardia 3/4 pic.twitter.com/eQFMaqhLyh
— 112 Cantabria (@112Cantabria) August 6, 2025
La Guardia Civil ha abierto una investigación para esclarecer las causas del trágico accidente.
Minuto de silencio
Castro Urdiales ha decretado un minuto de silencio, a las 12.00 horas, en la plaza del Ayuntamiento, donde se han reunido autoridades y vecinos del municipio. «Es un día trágico, ha sido un triste accidente que hemos conocido desde primera hora de la mañana. Como alcaldesa, quiero trasladar de parte de todo el Ayuntamiento nuestro más sincero pésame a la familia. Este tipo de accidentes siempre duelen pero cuando se trata de un menor todavía nos llega más al corazón y al sentimiento», ha dicho este mediodía la alcaldesa Susana Herrán.
Tramo sin protección
La zona de Cotolino, sobre todo en días calurosos, es uno de los puntos de la costa castreña más frecuentado por turistas y vecinos del País Vasco, dada la cercanía con la playa de Brazomar.
La caída del pequeño de 12 años se produjo en una parte del acantilado que carece de barreras protectoras.